Taconeando

Los días son muy largos en Verano. Los niños tienen muchas vacaciones. Con este calor no hay quién trabaje. Necesito el aire todo el día, cualquiera se mueve de casa. Estoy hinchada. Tengo los pies hinchados. Se le cae la casa encima…   … Algo bueno tendrán estos meses de espera, antes de pisar la arena. ¿O no? Cuando nos plantamos en la queja constante no nos damos cuenta de los mensajes que le mandamos a nuestro cuerpo y, creo yo, el Verano también tiene muchas cosas buenas, a saber… Las tardes de terraza hasta las tantas. Lo que cunden. La jornada intensiva. El ratito de siesta. Los que no echan siesta, tienen tiempo para leer. No hay atascos. La piscina. El cine casi vacío. Un plan para cada semana, que digo semana, para cada día. Menos ropa que lavar. Sacar el perro por la madrugada y que sea de día. Cuando caen cuatro gotas, refresca, y te crees Dios… … Podría seguir. Tanto para lo bueno como para lo malo, pero es cuestión de elegir lo ...

Madrid recoge . Es una mezcla de todos y sin ellos no sería. La ciudad en la que todos tenemos un sitio, la ciudad que cuida y mima. Somos uno con los demás, dice una canción de Axel. Somos en los demás, somos por los demás. No podemos olvidarlo. Y aquí, en esta ciudad, nadie es de fuera. Porque Madrid no sería sin los migrantes, sin todos aquellos que hemos venido en busca de una vida, de un trabajo y de la libertad.   Aquí nació nuestra ilusión, encontramos un futuro. Nosotros y muchos más. Da igual de dónde vengamos, Madrid nos ama. Da igual a quién amemos nosotros, nuestra ciudad nos quiere. Y aquí cabemos todos. No nos juzga Madrid, sus calles se abren sin pedir nada. Así que yo solo quiero que esta ciudad siga estando viva, que mire al futuro y no al pasado, que camine, que avance. Que sea la cuna de la libertad, la ciudad que grita y sufre cuando las mujeres sufren… Quiero una ciudad que siga latiendo al compás de las canciones de Sabina, que no du...